La Iglesia de la Virgen María
La Iglesia de la Virgen María tiene una cueva en donde se refugió San Sawiro patriarca de Antioquía en el momento en que fue expulsado de su pontificado durante el reinado de Justino el Rey en el siglo VI. Murió en esta cueva y su cuerpo impoluto fue llevado al Monasterio de Cristal en Alejandría. En la cueva hay un altar en el que San Sawiro solía celebrar la Santa Misa.
El día dos de Baba de cada año la Iglesia copta celebra un homenaje por la venida de San Sawiro a la tierra de Egipto. En esta celebración se menciona un gran milagro ocurrido a San Sawiro mientras asistía a la liturgia. El rey envió soldados para matarlo, pero Dios lo escondió, por lo que los soldados no le vieron aunque San Sawiro se encontraba cerca de ellos.
Cuando San Sawiro llegó a Egipto solía viajar disfrazado de un lugar a otro y de un monasterio a otro; Dios le daba numerosas señales y brindaba prodigios en sus manos, al punto que fue por algunos días al desierto de Shehit en el Valle Al-Natrón y entró en la iglesia con la apariencia de un extraño monje y un gran milagro ocurrió en ese momento. Fue después de que el sacerdote pusiera la ofrenda en el altar, circulara por la iglesia llevando el incienso, leyera las Epístolas y los Evangelios y al levantar el Aprosfareen no encontró la ofrenda en la bandeja. Entonces, el sacerdote lloró afligido y volviéndose hacia los feligreses dijo: “Hermanos, no encuentro la ofrenda en la bandeja y no sé si esto es por mi pecado o por el de ustedes”, Los feligreses también se afligieron y en ese, preciso momento, se apareció el ángel del Señor y le dijo -“Esto no es por tu pecado, ni por el pecado de los feligreses sino porque levantaste la ofrenda en presencia del patriarca”, por lo que el sacerdote respondió -“¿Y dónde está él, mi Señor?” El ángel señaló a San Sawiro que estaba sentado en una de las esquinas de la iglesia, y de este modo, el sacerdote lo reconoció por la gracia de Dios. Cuando el sacerdote se acercó a él, San Sawiro le ordenó que completara la misa después de que entrara al santuario con gran dignidad. El sacerdote al subir al altar encontró la ofrenda en la bandeja, entonces los feligreses bendijeron al Señor y glorificaron Su santo nombre. Posteriormente, San Sawiro dejó aquel lugar y se dirigió a la ciudad de Sakha en donde vivió con un arconte amante de Dios llamado Doroteo y permaneció allí hasta su muerte.
Otras iglesias en Sakha
Existen iglesias dedicadas al Arcángel Miguel, San Abakir, San Jorge y una la fortaleza. Estas se suman a otra iglesia en un pueblo cerca de Sakha llamada Centro Defriya Kafr El-Sheikh erigida en nombre de la Virgen María en donde ocurren numerosos milagros.