La Sagrada Familia se trasladó desde Dayrut Al-Sharif a la región de Meir Al-Quseya en la gobernación de Assiut, al otro lado del desierto y se encuentra ubicada entre la ciudad de Dayrut al norte, la ciudad de Manfalut al sur y junto al río Nilo al este. Al-Quseya está a unos 48 kilómetros de Assiut y a 326 kilómetros al sur de la ciudad de El Cairo.
En el antiguo Egipto Al-Quseya era llamada Qais o Qust y era una ciudad completamente diferente a la ciudad actual. La antigua ciudad desapareció y está situada en su totalidad debajo de la actual ciudad moderna. La zona arqueológica se llama Barba, que significa El templo. La deidad de la ciudad era Hathor y se decía que cuando sus habitantes vieron que los ídolos eran destruidos se negaron a recibir a la Sagrada Familia.
Esta zona arqueológica tiene una larga historia debido a que hay ocho tumbas faraónicas en las que hay imágenes que muestran la vida del antiguo Egipto. Las tumbas fueron descubiertas por el ingeniero inglés Blackman en 1919 y sus paredes contienen imágenes de escenas de la vida cotidiana en la agricultura, el pastoreo, la caza y escenas de actividades productivas y otras que muestran la vida recreativa, el deporte y los juegos de aquel entonces.
En estas tumbas también se encontraron imágenes de sarcófagos y estatuas. Además, los grabados en lengua copta en las paredes contienen las palabras “Jesús es el Cristo”. Existe una creencia popular que cuenta que la Sagrada Familia permaneció en una cueva en la montaña oriental en la ribera oriental del río Nilo que fue convertida en iglesia y es conocida como la Iglesia de la Virgen Romana o la Cueva de la Vaca. Esta iglesia es una cueva excavada en la roca y su santuario es una cueva circular. La tradición oral relata que la Sagrada Familia permaneció en este lugar durante su viaje a la tierra de Egipto durante diez días.
El monasterio fue redescubierto en el año 1837 por el Arcipreste Abd Al-Malak Gadallah durante el pontificado de Anba Yusab Metropolitano de la Cátedra de Dayrout, Sanbo y Qusqam en aquel entonces y durante el pontificado del papa Peter Al- Gawli (patriarca 109º).
El sacerdote Anba Yusab anunció con gran alegría que la Virgen María se le había aparecido en una visión y le dijo – “Cuidado con dedicar esta iglesia porque es sagrada por la llegada del Niño Jesús durante el viaje de la Sagrada Familia y el Niño permaneció allí durante diez días”.
En el pueblo de Meir Al-Quseya se construyó una iglesia para conmemorar el viaje de la Sagrada Familia en este lugar y fue dedicada al mártir Abu Sefein. La iglesia fue demolida y posteriormente reconstruida más de una vez.
Desde Al-Quseya la Sagrada Familia se trasladó al pueblo de Meir en donde sus habitantes les reverenciaron y el Señor Jesús les dio su bendición. Desde entonces, la tierra de cultivo del pueblo de Meir se volvió fértil y abundante en la producción agrícola hasta llegar a ser un modelo de fertilidad de esa tierra, por lo que surgió un proverbio en relación la tierra y sus habitantes “Los pobres son pobres, aunque planten en el pueblo de Meir”. El pueblo de Meir es uno de los pueblos antiguos ubicados al oeste de la ciudad de Al-Quseya y desde allí la Sagrada Familia se trasladó al Monte Qusqam.